Hace 6 años comenzó aquella lesión que me privaría de hacer una de las cosas que más me gusta en la vida... Hacer deporte. Al principio aquella formación dada por el crecimiento que solía doler, pero se detendría, aquella que nunca lo hizo y siguió doliendo. Aquella que hace dos años me dejó fuera definitivamente de cualquier actividad física que requiriese el uso de la rodilla (O sea, todos los deportes de impacto: Baloncesto, Tenis, Fútbol, Voleibol, entre otros). Aquella que espero en dos meses termine y me deje libre.
Han sido, sobretodo los últimos dos años desastrosos. Aquella distracción que hacía mi vida más llevadera, aquella adrenalina de un partido, o la emoción de un juego entre amigos. Aquellos sentimientos de ser parte de algo, ser parte importante de algo importante, aquella sensación de ser un yo diferente, un mejor yo. Todo eso se ha ido. Han sido dos años de frustraciones, dolor, ganas de acabarlo todo, y sobretodo paciencia.
Espero se acaben pronto, que pasen rápido estos dos meses más.