Y en cualquier momento partirás, pensé... y pensé y seguí pensando.
Me anunciaste tu partida, y lo primero que hice fue lamentarme. Todo fue un vivo retrato de hace 4 años, cuando me dijiste que tenías que irte de la ciudad, que tus padres habían conseguido un mejor empleo, pero debían vivir a más de 500km de donde nos encontrábamos. La distancia era horrible, y pese a que lo intentamos, sufrimos mucho... Yo en especial, sufrí porque me di cuenta que fui un idiota (como siempre), y en ves de pensar en mantener esto vivo, debí pensar en aprovechar y hacer inolvidables los últimos.
Hace dos años volviste, después de tu larga ausencia, el ver tus ojos azules y tu hermosa sonrisa me llenó de vida nuevamente. Habían pasado muchas noches donde no dejaba de pensar en ti, y muchos días en los que privaba mi sonrisa solo por el hecho de que no era para ti. Pese a que al principio las cosas fueron turbias, poco a poco, el sentimiento que nos mantenía volvió a salir a flote, y empezamos a sentirnos como en el pasado. Alegres, emocionados... felices.
Me anunciaste anoche tu partida, nuevamente, y lo primero que hice fue lamentare. Dos, tres, cuatro botellas de cerveza, y una larga noche. Esta vez te ibas por tu cuenta; estudio me dijiste. Comprendo muy bien, las oportunidades siempre son bien aprovechadas por ti. Ya no iban a a ser 500km, iban a ser 8000. No estaba listo para este golpe, sobretodo con la confianza que tomé al verte regresar. Ahora no me imagino un día sin oír tu voz, una semana sin llevarte de la mano para posteriormente perderme en tu mirada. No me imagino una tarde sin que me digas 'Camilo, deja de ser tan bobo', o un 'deja de ser tan idiota'. Realmente no me imagino muchas cosas para cuando te vayas.
Y en cualquier momento partirás, pensé... y pensé y seguí pensando, y volví a caer en el vicio de esperar que el universo arregle mi vida, sentando, mientras haces maletas, mientas piensas en tu futuro. No sé realmente cuantos días me queden, sé que no son tantos como espero, y realmente no estoy haciendo nada más que pensar y sobrellevar la idea con un poco de alcohol... Espero no sea muy tarde, y pueda... podamos aprovechar estos últimos días.
Espero no ser tan imbécil, y un día de estos dejar de pensar. Dejar de pensar para actuar.