Un poema sin destino,
Un dolor de pecho.
Un aliento que se apaga.
Una vida que por mí pasa.
Corre el destino,
Vuela de maneras inimaginables.
Se fue la inspiración.
Prometí que no volvería a escribir, pensé en olvidarlo todo lentamente, pero básicamente no puedo. Insistiré, tienes algo extraño en ti, que causa ciertas sensaciones en mí, provoca una serie de pensamientos, y en resumen me enloquece, me entorcepece, niebla mis ideas, me animaliza. A razón de esto escribiré, espero, algo bello y sincero.
Te extraño, a ti en todas tus facetas.
Extraño ver tus ojos de frente, sentir tu aroma.
Extraño acosarte con la mirada, hasta el punto de provocarte risas pasajeras.
Extraño eso de ti que me volvía loco. Te extraño.
Supongo que en algún momento la debí embarrar.
Lamento ese momento, aun sin conocerlo,
Puesto eso está condicionando mi existencia de forma que no te imaginas.
Me haces más falta de la que yo mismo creía.
Extraño tu mirada, tus ojos cafés,
Extraño el aura que nos absorbía,
Que compenetraba nuestra existencia, formaba lazos.
Lamento el momento en la distancia nos ganó.
Extraño las rimas que con tu sonrisa creaba,
extraño el hecho de que leyeras todas las noches los poemas que te escribía.
Fui un imbécil al no percatarme que te estaba perdiendo.
La cobardía se abalanza sobre mí
Te veo todos los días, mi corazón te busca.
Mi mente calla, la razón gana en mi cuerpo.
Quizás no sea el momento, quizás todo pase por alguna razón,
Quizás no era nuestro destino coexistir.
Quizás...
Pero, no quiero quedarme con la duda.
Ojalá algún día leas esto.
Ojalá algún día me perdones.
Ojalá, algún día, nuestras existencias se encuentren.
Quiero volverte a ver a los ojos.
Quizás me arrepienta al escribir esto,
Pero seguro me arrepentiré si jamás lo hago.
Hoy prometo, que seguiré firme en mi "Siempre estaré ahí".
Hoy prometo que cuidaré tu mirada desde la distancia.