En algún momento a llegar que me equivocaría de nuevo, tenía razón, las cosas no saldrían como yo lo esperaba, el pesimismo que asolaba mi ser cegaba aquellas posibilidades que nunca vi, y hoy me siento feliz de haberme equivocado. Me dejas sin palabras, no encuentro como expresar lo que por ti siento, mucho menos la forma en que tú haces sobre mí. Estoy perdidamente enamorado, de esa sonrisa, que desde el momento que nos conocimos muestras con fervor. Estoy perdidamente enamorado de los ojos en los que me pierdo y que finalmente son los cómplices de mi besos. Estoy locamente enamorado de tus labios, de tus manos, de tu cuerpo... Estoy profundamente enamorado de ti, Sofía.
A tu lado el tiempo vuela, y yo me siento más grande, más significante, me encanta perderme en la llevadera caminata que suele aguardarnos, o en tu risa, aquella que siempre espero ser yo quien provoca. Me encanta sostener tu mano, besar tu cuello, jugar con tu cabello, sentir que somos uno, sentir tu felicidad y extender la mía hasta el momento en que debemos, por razones ocurrentes, separar nuestras existencias, manteniendo aquél hermoso vinculo que nos une más allá de nuestro mismo entendimiento.
Hoy soy a tu lado la persona más feliz del mundo. Estoy inmensamente agradecido con la vida, el destino, la suerte, cómo se le quiera llamar a esa energía que mueve las existencias, de haberte puesto en mi camino, y que días que transcurren con normalidad, sean especiales, sean alegres, sean hermosos como tú.
Eres mi cielo, eres mi vida, eres todo lo que le puedo pedir a la vida. Decir que te quiero mucho es decir poco, pues en 4000 años que lleva extiendo el lenguaje, aun no existe una palabra que logre representar esto que por ti yo siento.
martes, 22 de julio de 2014
jueves, 17 de julio de 2014
Me salvaste.
Jamás lo pensé, después de caer y caer, y seguir cayendo, después de sufrir una de las caídas más duras de mi vida, jamás pensé que fueses tú que quien me sacara de este abismo. Jamás pensé que de tu mano saldría de este mar en el que me ahogaba, y que con un beso tuyo mis alientos volvieran a mi ser.
Hoy, gracias a ti soy un hombre nuevo, más valiente, no le temo al pasado, porque es sólo eso, y contigo, de tu mano voy, o mejor vamos juntos a un futuro. Hoy, después de mucho tiempo yendo por malos senderos de la vida, me encontré contigo, quien iluminas mi camino y mis formas de ver el mundo. Hoy soy feliz nuevamente, a tu lado.
Como aquél atardecer que nuestros ojos presenciaban,
fue ese beso quien desató la pasión que nuestros corazones entrañan,
no es fácil entender, como tus sonrisas en mi desataban,
esos sentimientos que en mi corazón se extrañan.
La tranquilidad que siento,
cuando tengo tus ojos a mi lado,
me hacía demasiada falta, no miento.
La alegría que proclamo cuando escucho tu nombre,
el sonrojo de mis mejillas cuando en mis brazos te tengo,
el calor que con tus besos mi cuerpo comprende.
Hoy, gracias a ti soy un hombre nuevo, más valiente, no le temo al pasado, porque es sólo eso, y contigo, de tu mano voy, o mejor vamos juntos a un futuro. Hoy, después de mucho tiempo yendo por malos senderos de la vida, me encontré contigo, quien iluminas mi camino y mis formas de ver el mundo. Hoy soy feliz nuevamente, a tu lado.
Como aquél atardecer que nuestros ojos presenciaban,
fue ese beso quien desató la pasión que nuestros corazones entrañan,
no es fácil entender, como tus sonrisas en mi desataban,
esos sentimientos que en mi corazón se extrañan.
La tranquilidad que siento,
cuando tengo tus ojos a mi lado,
me hacía demasiada falta, no miento.
La alegría que proclamo cuando escucho tu nombre,
el sonrojo de mis mejillas cuando en mis brazos te tengo,
el calor que con tus besos mi cuerpo comprende.
jueves, 3 de julio de 2014
En esta noche fría.
Estas noches frías, donde me falta tu sonrisa son donde más anhelo que el tiempo pase rápido y nos ubique en un mismo espacio, desde aquél momento en que tomo tus manos, observo tu más dulce sonrisa y te robo un beso le pido a la vida que el tiempo se detenga, pero el espacio siga moviéndose. Tú y yo, en un lapso indeterminado de tiempo, buscando la felicidad, aquella que podemos encontrar en el comentario más estúpido que salga de mi boca, o la cosa más tierna que salga de la tuya. Aquella felicidad que sentimos cuando tus labios y los míos se tocan.
En estas noches frías pienso demasiado. Pienso en ti, pienso en mí. Pienso en nosotros. Pienso en poemas que se acoplen a tu belleza, y pienso en rimas y palabras jocosas para hacerte sonreír, para escuchar tu risa, para ver tus ojos a mi lado y saber que lo que siento por ti es mucho más fuerte de lo que logro entender, para tomar tu mano y sentirme más fuerte, más seguro, más feliz. Pienso en cómo distraerte para robarte uno... dos... tres... varios besos. Basta con quitarme mis gafas, y recorrer tu mejilla con la mía, sin pensarlo mucho buscar tus labios, y sin ángulo, pero con agilidad robarte aquello que tanto aprecio y anhelo, sabiendo que eres cómplice de mis fechorías.
En estas noches frías, anhelo tu presencia. Anhelo tus abrazos, anhelo tu sonrisa, anhelo tu mirada. Te anhelo a ti... En estas noches frías extraño cada parte de ti, cada cosa que sabes que me hace feliz, cada sonrisa, cada abrazo, cada mirada que me regalas, cada beso... Extraño tus comentarios, que me digas que soy un ridículo cada vez que en mi estupidez intento hacerte feliz, extraño que me digas que todo estará bien cuando sabes que estoy más preocupado que nunca... Extraño de sobremanera cuando respondes a mi pregunta favorita... "¿Qué sabes?"...
Hoy, anhelo tu presencia. Hoy me haces más falta que ayer, menos que mañana... y En esta noche fría anhelo que el tiempo pase rápido, y tú puedas ver como haces a este ser humano, la persona más feliz sobre la faz de la tierra. En esta noche fría, anhelo decirte al oído lo mucho que te quiero...
En estas noches frías pienso demasiado. Pienso en ti, pienso en mí. Pienso en nosotros. Pienso en poemas que se acoplen a tu belleza, y pienso en rimas y palabras jocosas para hacerte sonreír, para escuchar tu risa, para ver tus ojos a mi lado y saber que lo que siento por ti es mucho más fuerte de lo que logro entender, para tomar tu mano y sentirme más fuerte, más seguro, más feliz. Pienso en cómo distraerte para robarte uno... dos... tres... varios besos. Basta con quitarme mis gafas, y recorrer tu mejilla con la mía, sin pensarlo mucho buscar tus labios, y sin ángulo, pero con agilidad robarte aquello que tanto aprecio y anhelo, sabiendo que eres cómplice de mis fechorías.
En estas noches frías, anhelo tu presencia. Anhelo tus abrazos, anhelo tu sonrisa, anhelo tu mirada. Te anhelo a ti... En estas noches frías extraño cada parte de ti, cada cosa que sabes que me hace feliz, cada sonrisa, cada abrazo, cada mirada que me regalas, cada beso... Extraño tus comentarios, que me digas que soy un ridículo cada vez que en mi estupidez intento hacerte feliz, extraño que me digas que todo estará bien cuando sabes que estoy más preocupado que nunca... Extraño de sobremanera cuando respondes a mi pregunta favorita... "¿Qué sabes?"...
Hoy, anhelo tu presencia. Hoy me haces más falta que ayer, menos que mañana... y En esta noche fría anhelo que el tiempo pase rápido, y tú puedas ver como haces a este ser humano, la persona más feliz sobre la faz de la tierra. En esta noche fría, anhelo decirte al oído lo mucho que te quiero...
El poeta que de tu sonrisa se enamoró.
Quizás el destino nos juntó, todos son confabulaciones del mismo, pero desde el día que te conocí en ti noté algo particular, algo que no veía desde hace muchísimo tiempo, una sonrisa que reflejaba la verdadera felicidad del alma. Aquella felicidad que viene de las cosas simples, de las cosas cotidianas, de las cosas sencillas... Ahondé tu sonrisa un gran tiempo, sentía tu energía sobre la de las demás personas, y pese a yo ser un desastre en todos estos temas, logré finalmente vivir dentro de esa sonrisa.
Entiendo de sobremanera como el pasado nos persigue, ambos vivimos situaciones complejas, y aunque no conozco a fondo las tuyas, sé que de ahí provienen ciertos miedos que atormentan el presente, lo sé, a mi me pasa igual... Sin embargo, desde que logré entrar en ti, me di cuenta que juntos podemos ser más fuertes que ellos, juntos somos mucho más fuertes que los miedos que nos acogen, y juntos los superaremos. En tu mirada encontré ese apoyo que necesitaba, y en tu sonrisa encontré ese empuje que logra dar energía a mi alma y me saca adelante en un pulso desesperado de alegría y comprensión.
Hoy soy aquel poeta al que tienes enamorado, aquel que se fijó en tu sonrisa, en tu mirada, que es prisionero de tus besos. Hoy soy yo quien te necesita
Entiendo de sobremanera como el pasado nos persigue, ambos vivimos situaciones complejas, y aunque no conozco a fondo las tuyas, sé que de ahí provienen ciertos miedos que atormentan el presente, lo sé, a mi me pasa igual... Sin embargo, desde que logré entrar en ti, me di cuenta que juntos podemos ser más fuertes que ellos, juntos somos mucho más fuertes que los miedos que nos acogen, y juntos los superaremos. En tu mirada encontré ese apoyo que necesitaba, y en tu sonrisa encontré ese empuje que logra dar energía a mi alma y me saca adelante en un pulso desesperado de alegría y comprensión.
Hoy soy aquel poeta al que tienes enamorado, aquel que se fijó en tu sonrisa, en tu mirada, que es prisionero de tus besos. Hoy soy yo quien te necesita
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