Estoy nuevamente solo, sentado en el puto andén de siempre. Veo los carros pasar mientras me acabo el cigarrillo... me agarro levemente la pierna, para dar a conocer al mundo que no me siento cómodo con ella. Primer error... no debería guardarme ese sentimiento y debería comunicarlo a alguien a quien le tenga cariño y confianza. Mientras más pasa el tiempo me doy cuenta que el verdadero problema estar ahí. Acabo de llegar a un punto donde nunca había llegado, siento que todos mis problemas me ganan y no puedo ni con los más simples. Siento que nadie me apoya cuando siempre hay ahí, una gran cantidad de personas que son capaces de hacerme feliz de una u otra manera, y siento que nunca saldré del abismo en el que estoy metido cuando aparentemente hay una escalera al lado.
¿Por qué? ¿Es porque nunca logre confiar completamente en una persona, y aún sigo sin? Hay muchas preguntas que podría hacerme, pero todas terminarían en lo mismo... mi forma de ser. Y es que una vez detectado aquel problema insolucionable, llamado dolor debo mirar que sale de ahí y como puedo arreglarlo. Es decir, el dolor nunca se irá, estoy más que seguro de eso, pero todas las cosas que me han traído ese dolor en forma de frustración, falta de autoestima, etc, si tienen solución, y ahí es donde entra la mejor parte de la historia; debo pelear contra mi mismo.
Yo vs yo, yo contra mis miedos, contra mis pensamientos, contra mi ser. Sin duda alguna una batalla muy difícil y que nunca pensé que tendría. Una batalla que ganaré con pequeños cambios y poco a poco. Sé que si lo hago de otra manera, buscando caminos fáciles, caeré nuevamente en depresión o perderé todo lo que he intentado. Y uno de los pequeños cambios comienza aquí... Esta es una batalla que no puedo luchar solo, y debo despedirme de mi orgullo para pedir ayuda, y confiarle a quien se que quiero esto, para en el momento en que logre salir de toda esta mierda, pueda ser mejor tanto conmigo, como para quien realmente quiero en mi vida.
jueves, 23 de febrero de 2017
domingo, 19 de febrero de 2017
Look around Camilo, you're all alone.
Estoy de nuevo sentado dónde nos vimos por ultima vez. La pared que está a mi lado dejó marcado en mi puño un poco de ladrillo, pero ya pasaron tres días y en ella no hay ningún rastro de un golpe, solo lo hay en mi mano y en mí. Hoy estoy solo, a diferencia de hace tres días donde te abracé durante un buen rato, mientras estaba rodeado de más amigos. Tres días no son tres días cuando el dolor va más allá de lo que imaginas, y es que ésta ultima semana en especial volví a recaer. Los pensamientos se empiezan a tornar destructivos, y la frustración se convierte en ira.
La unión de estos pensamientos destructivos, ira y un estado de soledad emocional me tienen acá nuevamente. En un asqueroso limbo de emociones, donde no hay claridad, dónde todo color se torna gris, y cada luz de esperanza en mi vida se apaga al instante de haber aparecido. Y es que, desde este puto andén, veo como todas las personas hacen algo con su vida dónde yo no intervengo... todas aquellas personas a las que quiero tienen alguien más y aunque sé que es egoísta quererlas para mí solo, me duele ser el único que no tiene ese 'alguien más'.
Y es que quisiera poder soportar todos los problemas que cargo yo sólo, pero tristemente no puedo. ¿Cuándo fue la última vez que alguien me preguntó por mi constante dolor?, ¿Cuando fue la última vez que alguien se interesó realmente por como estaba, o como me sentía?... Ese es el problema de no tener ese 'alguien más'. Poco a poco me voy convirtiendo en un amigo desechable más. Sin importancia como tal, y solo de utilidad en ciertas ocasiones. Hay días muy lindos, dónde me encuentro con todos ustedes, dónde bebemos, fumamos, sonreímos y gozamos, pero al final de todos esos días, siempre a mi casa, solo, a ver como todos pueden mantener esa felicidad estable, menos yo.
Hace tres días estábamos hablando de la luna y las estrellas, mientras el humo del cigarrillo que me estaba acabando, se iba lentamente en una corriente de viento, y el vino que en caja teníamos poco a poco iba terminándose. Hace 20 minutos, mandé a la mierda la última colilla, mientras me trago el último sorbo de cerveza. Mira a tu al rededor Camilo, estás completamente solo.
Y es que yo sé que no estoy solo, porque los tengo a todos ustedes -mis amigos- , y sé que estarán para mí siempre que los necesite... pero soy el único idiota que no ha podido seguir adelante con sus problemas, y estoy atrapado en un abismo, viviendo mi peor temporada en mucho tiempo. Perdido, nublado, deprimido y enojado.... Mira a tu al rededor Camilo, estás completamente solo.
La unión de estos pensamientos destructivos, ira y un estado de soledad emocional me tienen acá nuevamente. En un asqueroso limbo de emociones, donde no hay claridad, dónde todo color se torna gris, y cada luz de esperanza en mi vida se apaga al instante de haber aparecido. Y es que, desde este puto andén, veo como todas las personas hacen algo con su vida dónde yo no intervengo... todas aquellas personas a las que quiero tienen alguien más y aunque sé que es egoísta quererlas para mí solo, me duele ser el único que no tiene ese 'alguien más'.
Y es que quisiera poder soportar todos los problemas que cargo yo sólo, pero tristemente no puedo. ¿Cuándo fue la última vez que alguien me preguntó por mi constante dolor?, ¿Cuando fue la última vez que alguien se interesó realmente por como estaba, o como me sentía?... Ese es el problema de no tener ese 'alguien más'. Poco a poco me voy convirtiendo en un amigo desechable más. Sin importancia como tal, y solo de utilidad en ciertas ocasiones. Hay días muy lindos, dónde me encuentro con todos ustedes, dónde bebemos, fumamos, sonreímos y gozamos, pero al final de todos esos días, siempre a mi casa, solo, a ver como todos pueden mantener esa felicidad estable, menos yo.
Hace tres días estábamos hablando de la luna y las estrellas, mientras el humo del cigarrillo que me estaba acabando, se iba lentamente en una corriente de viento, y el vino que en caja teníamos poco a poco iba terminándose. Hace 20 minutos, mandé a la mierda la última colilla, mientras me trago el último sorbo de cerveza. Mira a tu al rededor Camilo, estás completamente solo.
Y es que yo sé que no estoy solo, porque los tengo a todos ustedes -mis amigos- , y sé que estarán para mí siempre que los necesite... pero soy el único idiota que no ha podido seguir adelante con sus problemas, y estoy atrapado en un abismo, viviendo mi peor temporada en mucho tiempo. Perdido, nublado, deprimido y enojado.... Mira a tu al rededor Camilo, estás completamente solo.
lunes, 13 de febrero de 2017
El miniequilibrio inesperado.
¿Pensaste que algún día llegaríamos a este punto? Por primera vez en muchísimo tiempo no siento que esté mal, pero tampoco me siento tan bien como creo que debería sentirme. Me encanta verte sonreír, pero así mismo no me desvivo por tu sonrisa. Me encanta estar a tu lado, pero no suelo sacrificar cosas más allá de para tenerte junto a mí. Si digo que no sonrío como un estúpido cuando leo algún mensaje lindo que te nace, o que no me lleno de alegría cuando siento tus labios o tu piel, estaría mintiendo de la forma más ruin posible, sin embargo comprendí que hay momentos para todos, y el hecho de no tenerte de mi mano, o de ser el primero a quien escribes no acabará con mi pequeño mundo de fantasía donde logro sentirme estable.
Quizás en algunos momentos siento que doy más de lo que debería para recibir 'tan poco' pero aprendí a entender a las personas y eso me genera demasiada tranquilidad, por lo cual aprovecho esos pequeños instantes de felicidad a tu lado.
Quizás en algunos momentos siento que doy más de lo que debería para recibir 'tan poco' pero aprendí a entender a las personas y eso me genera demasiada tranquilidad, por lo cual aprovecho esos pequeños instantes de felicidad a tu lado.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)